NINA, dogo alemán hembra de 3 años.
MOTIVO DE CONSULTA: miedo exagerado/fobia a personas y perros. Asustadiza en general.
Se incorporó a la familia con 2 meses de edad, la propietaria no conoce su origen (la recogieron los hijos). Ya presentaba miedos.
Con 5-6 meses de edad comenzó a ladrar y gruñir a la gente, y aprendió que la gente se asustaba.
Miedosa con los niños.
Con adultos que conoce si lleva tiempo sin verlos actúa como si se olvidara y vuelve a ladrarles.
Ha convivido con un gato, con el que se llevaba bien.
Es muy dependiente de su dueña, aunque también necesita su espacio.
Su dueña ha intentado socializarla sin provocar fobias, aunque es muy difícil dado que por el tamaño, Nina impone y cuesta que la gente se acerque y poder trabajar una desensibilización.
Por ello la propietaria busca la opción de terapias naturales.
Planteamos tratarla tanto con homeopatía como con flores de Bach, dado que la acupuntura pueda ser más traumática para ella, aunque es cierto que se deja punturar.
Se le pauta un medicamento homeopático, Calcarea Carbonica 30CH (1 vez al día 5 días) y se le elabora una fórmula floral (4 gotas 6 veces al día).
A los 15 días la propietaria comenta que la ve más tranquila y duerme más. (Dormía bien antes pero este tipo de tratamientos cuando el animal tiene estrés hace que descansen más porque les ayuda a relajarse).
Cambiamos la dilución de Calcarea carbonica subiendo a 200CH, para influir más en la mente ya que los miedos seguían similar.
Nina mejora, dejándose acariciar por desconocidos y juguetea con un perro que antes le daba miedo.
Al mes repetimos CC 200 CH pues lleva unos días de nuevo más miedosa. Cambiamos ligeramente la fórmula floral, añadiendo una flor para impaciencia.
Un mes después su propietaria comenta que está estancada. Repasando la anamnesis nos detalla que es una perra al que “no se le olvidan las cosas” y decidimos tratar con homeopatía por si hay alguna pena o rencor antiguo grabados en ella. Se pauta Natrum muriaticum 30 CH y después repetir CC 200CH. Se mantiene fórmula floral.
Se acerca ella a un dogo alemán macho mucho más grande que ella al que nunca dejaba acercarse.
Subimos a CC 1000CH. La propietaria nos cuenta que se ha dejado tocar por una niña pequeña. Otro día le atacó un perro pero no huyó (es lo que hubiera hecho antes), sino que permaneció junto a su dueña.
Poco a poco se van retirando las flores de Bach.
Tres meses después Nina no toma medicación y la dueña sigue trabajando su socialización. Nina se muestra mucho más segura, tolerando personas y perros e interactuando con ellos.